Los coletazos finales de la DANA que desde hace una semana ha asediado gran parte del litoral mediterráneo se han centrado este lunes en Catalunya. Según indican los registros, durante esta jornada el temporal ha dejado acumulaciones de hasta 150 litros por metro cuadrado en ciudades como Barcelona o Tarragona y de 130 en localidades como Viladecans. La intensidad de las lluvias ha anegado decenas de localidades catalanas, ha aumentado drásticamente el caudal de ríos como el Francolí o el Llobregat, superando el umbral de peligro en municipios como Sant Vicenç dels Horts, y durante varias horas ha obligado a encender las alertas ante el riesgo de desbordamientos y de inundaciones. Por el momento, todo apunta a que el temporal ha empezado a disiparse pero no se descartan precipitaciones puntualmente torrenciales durante la tarde.

El president de la Generalitat, Salvador Illa, ha comparecido pasadas las 19.00 horas para dar por finalizado el episodio de tiempo violento. “Ya no estamos en alerta pero habrá lluvias intensas lo que queda de semana”. Con estas palabras ha comunicado que “los episodios más intensos de la DANA han acabado” en Catalunya, pese a que se mantiene una situación de “prealerta” ante posibles lluvias torrenciales lo que queda de semana en buena parte del territorio catalán.

Illa ha anunciado que este mismo martes el Govern tomará varias medidas con el objetivo de preparar a Catalunya para que esté en mejores condiciones por si, en el futuro, tiene que enfrentarse a episodios de lluvias torrenciales como las que se han visto en Valencia. La más importante: la Generalitat revisará todas las actividades que se hacen en Catalunya en terrenos inundables. El president ha asegurado que no se harán excepciones y que se revisarán todas las actividades ya sean económicas, residenciales o lúdicas.